A menos de 200 kilómetros al este de Jacksonville, Florida, los expertos del Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC, por sus siglas en inglés) identificaron una zona donde se forma un sistema de vientos y baja presión con posibilidad de derivar en un fenómeno del clima, mismos que podrían generar lluvias intensas en la costa del Atlántico durante los próximos días.
Hasta el momento, dicha perturbación del clima está identificada en los reportes de los expertos por el nombre clave de Invest 92L y produce vientos de hasta 56 kilómetros por hora, pero los aguaceros y las tormentas eléctricas asociadas aún no están lo suficientemente organizadas como para considerarlo un ciclón tropical.
Según las estimaciones, Invest 92L se acercará a la costa de Florida o Georgia durante las últimas horas de este viernes, hasta entonces, la trayectoria que seguirá es incierta. El NHC informa que, en las próximas 48 horas, se mantiene un 60% de posibilidades de que pueda convertirse en una depresión tropical de corta duración, por lo que enfatiza la importancia de “monitorear su progreso”.
Independientemente de la posibilidad de que evolucione a ciclón y el recorrido que tendría en territorio de Estados Unidos, si Invest 92L llega a la costa sureste con su intensidad actual, podría generar mareas fuertes, rachas de vientos y lluvias intensas y tormentas eléctricas, particularmente en el sureste de Georgia.
En cuanto a Florida, la oficina del Servicio Meteorológico Nacional en Melbourne lanzó una advertencia sobre la posibilidad de vientos y lluvias intensas antes del fin de semana: “Se esperan bandas de lluvias y tormentas aisladas, especialmente al norte de Cabo Cañaveral desde el jueves por la noche”. Además, alertó sobre un alto riesgo de corrientes de resaca que ponen en peligro la vida de las personas que estén en todas las playas del Atlántico central de Florida, por lo que se sugiere mantenerse fuera del agua.
Una segunda preocupación surge en el golfo de México
Con los datos recabados por un avión de reconocimiento de la Reserva de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, el NHC informó que también vigila otra perturbación en el suroeste del golfo de México, que tiene una mayor probabilidad de desarrollo que la anterior. “Las condiciones ambientales parecen propicias para un desarrollo gradual después de que este sistema se mueve sobre la Bahía de Campeche esta noche, y una depresión tropical podría formarse sobre el suroeste del Golfo de México este fin de semana”, detalló en un boletín por separado.
Este sistema, que aún no tiene un nombre clave, podría convertirse en una depresión tropical durante el fin de semana mientras se desplaza lentamente por las costas de México, hacia el oeste-noroeste o noroeste por lo que podría alcanzar territorio de Estados Unidos a principios de la próxima semana.
De acuerdo a la última actualización del Servicio Meteorológico Nacional de México, la tormenta tropical Alberto se degradó a baja presión remanente en horas de la tarde del jueves, aunque señalaron que aún se prevén lluvias torrenciales en buena parte de los estados del centro y norte del país.
Por su parte, el NHC de Estados Unidos reportó que algunas localidades de la costa de Texas pueden percibir niveles elevados de la marea, con corrientes marinas que podrían representar complicaciones para la navegación y riesgos para la vida humana.
LA NACION