Aunque no hubo confirmaciones oficiales y ni tampoco emanó información desde la propia operadora involucrada, fuentes del sector provincial y ámbitos empresarios aseguraron ante la consulta de ADNSUR la oferta de Rovella Energía quedó formalizada como la más alta entre las que pulsearon por quedarse con Manantiales Behr.
Esto no significa que la operación ya esté definitivamente aprobada, pero quienes conocen la operatoria aseguraron que se trató de un paso más que importante, como parte de una transacción que aún debe completar otras etapas, de no menor importancia.
Entre ellas, según se indicó, resta que las partes verifiquen punto por punto los aspectos involucrados en la operación. Esto abarca desde las condiciones de pago, que el grupo empresario habría propuesto con un primer desembolso de 300 millones de dólares y otros 200 en un corto plazo, hasta los bienes inventariados por la compañía petrolera.
Ávila confirmó que Rovella Energía compró Manantiales Behr
Todo esto terminará de dar forma al acuerdo final de compra-venta, conocido como SPA por su sigla en inglés, con el contrato final de cada uno de los aspectos involucrados.
Provincia debe dar la autorización
Una vez cerrado el traspaso entre privados, deben presentar ante el gobierno de Chubut el pedido de autorización para avanzar con la cesión. En el plano provincial intervienen dos áreas. Por un lado, el Ministerio de Hidrocarburos, que apunta a verificar las garantías para el desarrollo de los planes de inversión a desarrollar; y por el otro, la Secretaría de Ambiente, que debe recibir la auditoría de cierre, con el relevamiento de pasivos y el plan de saneamiento a desarrollar por el nuevo operador.
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Fuentes cercanas al gobierno provincial confiaron que, en esa etapa, se buscará establecer garantías para que los planes de inversión comprometidos se desarrollen durante el año próximo más allá de cualquier vaivén vinculado a los precios internacionales del petróleo, que proyectan para 2026 un escenario de baja, más pronunciada aún que en el presente.
De este modo, las estimaciones ahora se estiran hasta marzo del año próximo, para que, una vez cumplido todo el proceso y aprobada la transacción, de no mediar inconvenientes en lo pre acordado hasta hoy, el nuevo operador se haga cargo del área.
Lo que no está claro es si habrá algún tipo de reaseguro para evitar que los yacimientos que conforman el bloque vean afectada su producción en los próximos meses, ya que la operadora que está traspasando el activo dio por cumplidas las exigencias de inversión planteadas por el contrato de concesión.