Solana Sierra no se quiere despertar de su sueño en Wimbledon
Tras llegar al cuadro principal como lucky loser, la argentina venció a la local Katie Baultier y se medirá con la española Bucsa.
Solana Sierra no quiere despertarse de su sueño: la marplatense de 21 años logró la mejor victoria de su carrera y se clasificó para la tercera ronda de Wimbledon, certamen al que accedió con lucky loser luego de perder en la tercera etapa de la clasificación. Como yapa, este triunfo la consolidará dentro del top 100, ya que quedará cerca de la posición 80 del ranking de la WTA en su próxima aparición. Sólo cuatro tenistas en la Era Abierta pasaron a una tercera ronda en Wimbledon, tras llegar como perdedora afortunada de la qualy.
En un duelo que se extendió por casi dos horas, Sierra se impuso por 6-7 (7-9), 6-2 y 6-1 a la local Katie Baultier por lograr así su primer triunfo sobre una top 50, ya que la local ser ubica en el puesto 43 del ranking, además de haber vencido en la primera ronda a la preclasificada española Paula Badosa. De esta manera, la marplatense se medirá en la siguiente instancia con la también ibérica Cristina Bucsa, que sorprendió al eliminar a la croata Donna Vekic. No se trata de ningún cuco, más allá de ser una tercera ronda de Grand Slam, ya que la española de 27 años arrancó el torneo en el puesto 102 del escalafón, aunque llegó a ser 56 del mundo hace algunas temporadas.
Problema de hogar
Claro que no todo podía ser tan perfecto para la marplatense en su primera aparición en la Catedral. Su inesperado rendimiento la llevó a tener que vivir una situación insólita: como ganó más partidos de lo que se imaginaba, antes de su duelo ante Bucsa deberá buscar su tercer alojamiento distinto en Londres, ya que tuvo que cambarse de departamento dos veces, porque no pudo renovar su estadía en los alojamientos originales. «Perdí en la qualy, pero todavía seguimos en carrera. Ya cambiamos tres veces de departamento. Por suerte es un lindo problema», dijo la marplatense al pie de pista, mientras el público celebraba su ocurrencia y su madre asentía desde la tribuna.
Es que la presencia de la argentina en el cuadro principal se dio casi de casualidad. En poco más de dos horas, Sierra pasó de esta eliminada en la tercera vuelta de la qualy a estar clasificada a la segunda ronda del cuadro principal de Wimbledon. La baja a último momento de la belga Greet Minnen le abrió una chance a la argentina, que casi no tuvo tiempo ni de procesar la noticia y debió saltar a la cancha para medirse con Olivia Gadecki. Y en una hora 38 minutos de juego, Sierra logró su boleto a la segunda ronda gracias al triunfo por 6-2, 7-6 (10-8) sobre la australiana.