La hinchada xeneize que conmueve Estados Unidos con su aliento tiene razones matemáticas para mantener viva su ilusión de conseguir el boleto a los octavos de final del Mundial de Clubes, aun tras la derrota ante el Bayern Munich. Para sostener la esperanza, también vale apoyarse en las palabras del entrenador del conjunto alemán, Vincent Kompany, quien aseguró en la conferencia de prensa posterior al partido que sus dirigidos buscarán vencer al Benfica en el próximo encuentro, ese que será clave para la supervivencia de Boca en el torneo.
«Es absolutamente imposible no ir a por la victoria. Vamos a ir a ganar al 100%. No hay discusión», afirmó el técnico belga en referencia al juego por la última fecha de la fase de grupos. Sus palabras generan esperanza en Boca, que para clasificar segundo del Grupo C necesita golear al Auckland City por un margen suficiente para superar la diferencia de goles del Benfica (el equipo portugués tiene +6 y el argentino, -1) y esperar que los conducidos por Kompany derroten a los portugueses.
La buena presentación del conjunto dirigido por Miguel Ángel Russo ante dos rivales europeos es otro de los argumentos que tienen sus fanáticos para soñar con la clasificación. Miguel Merentiel, goleador xeneize en la noche del viernes, les pidió «que crean, porque nosotros vamos a ir hasta el final». «Sentí un pinchazo sobre el final y habrá que ver el trabajo de los kinesiólogos para poder estar el martes», dijo por su parte Ayrton Costa, quien dejó preocupados a los hinchas xeneizes para su tercer partido en el Mundial de Clubes.