Hábil administrador de gestos ante la visita de políticos argentinos, el Papa Francisco le dedicó una amplia sonrisa a Ricardo Quintela, el gobernador peronista de La Rioja que visitó el Vaticano el viernes. Es el mandatario provincial más enfrentado a Javier Milei, lo desafió al emitir su propia moneda, los «Chacho» y ahora suena para presidir el Partido Justicialista, vacante desde la renuncia de Alberto Fernández por el escándalo de denuncia de agresiones a su exesposa Fabiola Yáñez.
Sonrisa de oreja a oreja, apretón de manos y unas fotos con la familia de gobernador riojano fueron parte de las escenas que le dedicó el Papa Francisco al mandatario provincial que hace pocos días juró ante la nueva Constitución provincial, que le obsequió a Bergoglio. «Fue una charla muy amena y me puso muy contento verlo bien de salud al Santo Padre así como su cálido recibimiento», dijo Quintela al salir del encuentro.
Quintela remarcó que en la audiencia privada hablaron sobre la Reforma de la Constitución local, donde le explicó el concepto de «Renta Básica Universal». «Este encuentro subraya el compromiso del Gobierno de La Rioja con los valores de solidaridad y cooperación internacional, y reafirma nuestra dedicación a trabajar por la paz, la justicia social y el bienestar de todas y todos los riojanos», destacó el gobernador.
La gestualidad del Papa argentino no solo se miden en sonrisas sino también en quiénes son los recibidos, por cuánto tiempo y si es en audiencias privadas. Hace pocas semanas tuvo un encuentro con sindicalistas de Aerolíneas Argentinas, apuntados por el Gobierno de Milei y también con el gobernador bonaerense Axel Kicillof.
Ahora fue el turno de Quintela, el más desafiante de los mandatarios peronistas. No asistió al Pacto de Mayo que Milei organizó en Tucumán y lanzó: «La Rioja luchó y siempre luchará por una Independencia verdaderamente federal».
Ante la advertencia de la Casa Rosada, Quintela en enero anunció que por el ajuste de Nación a la provincia emitiría un bono para pagar salarios de estatales. Finalmente el pago llegó varios meses después. Los altos funcionarios del Poder Ejecutivo provincial recibieron $100.000 en «Chacho» como parte del sueldo de junio, mientras que los cargos de directores generales recibirán $50.000 en la cuasimoneda riojana.
Pero la bienvenida del Papa Francisco a Quintela también puede tener una lectura de cara al 17 de noviembre, que además de ser el día de la militancia peronista, es la fecha de la elección de las nuevas autoridades en el PJ nacional, ya huérfano de conducción por la renuncia de Alberto Fernández.
Quintela es uno de los dirigentes que se quiere probar el traje para conducir al peronismo. Abiertamente enfrentado con el presidente Milei y con el presidente de la Cámara de Diputados, el también riojano Martín Menem, juró con la nueva constitución provincial en un acto en el que se mostró con Axel Kicillof, otro gobernador que podría acompañarlo.
Ese acto de jura de la Constitución en La Rioja funcionó como punto de encuentro para la catarsis y rosca política. Además, de Kicillof, también participaron una veintena de diputados nacionales, más de diez senadores y vicegobernadores.
Una particularidad que surgió en medio de la visita de Quintela al Vaticano fue un rumor que sus detractores hicieron correr en las redes sociales. La versión indicaba que tras el encuentro con el Papa Francisco, el gobernador de La Rioja se encontraría con el presidente de la Federación Rusa, Vladimir Putin.
Ante la consulta de Clarín, desde su entorno negaron esa agenda y remarcaron que el viaje tenía previsto solo el encuentro con el Papa Francisco y regreso a la Argentina.