La Ciudad Autónoma de Buenos Aires es uno de los polos gastronómicos más importantes de la región gracias a su diversidad de propuestas y a los altos niveles alcanzó en las últimas décadas. En este sentido, la prestigiosa Guía Michelin recomendó algunos restaurantes ocultos que invitan a los amantes de la gastronomía a degustar de los más exquisitos platos. ¿Cuáles son?
A Fuego Fuerte
La primera recomendación de la Guía Michelin es la propuesta del chef y propietario Julio Lunghi Mazzieri. Al llegar, no hay ningún cartel que lo identifique, pero una gran puerta de madera se destaca dentro del barrio residencial con un timbre. “Estar a puertas cerradas es un indicador del servicio discreto que podemos ofrecer al comensal”, destacó su dueño en diálogo con la Guía Michelin.
Una vez adentro, hay un amplio espacio decorado con mesas de manteles blancos, sillones individuales, flores, cristalería destacada, vajilla de diseño y muchos detalles para un total de 16 comensales. Cuenta con un menú de 17 pasos con productos elegidos a conciencia y presentaciones meticulosas y sorpresivas. “La última parte del menú tiene impronta propia, ahí buscamos presentar aquello que más sorprende: bombones de rocoto y romero, el helado de remolacha y ganache de palta, son dos ejemplos”, manifestó Julio.
Ubicación: Estado de Palestina 1167 – CABA
Casa Cavia
La segunda opción es una antigua casona de dos pisos construida originalmente en 1927. Es restaurante, pero también cafetería, bar, librería, florería y editorial. “Hoy ya todos conocen esta casa, ha sido fotografiada por miles de personas a lo largo del tiempo. Es una maravilla de la arquitectura. Queremos mantener esa calidez de hogar que tiene, de casa de familia, abierta al público a toda hora, para que la gente pueda disfrutar de esta residencia de gran valor arquitectónico”, manifestó la directora de Casa Cavia, Guadalupe García Mosqueda, en diálogo con la guía.
Su cocina está a cargo de Julieta Caruso, que busca ingredientes locales, muchos de ellos de huerta propia, para su propuesta que cambia a lo largo del día. Se puede disfrutar un brunch, como un cóctel de autor de la misma manera. En cualquier momento se disfrutará de la terraza interior y de la fuente central que le da un toque mágico al lugar.
Ubicación: Cavia 2985 – CABA
Marti
La tercera opción está a cargo de Germán Martitegui y para acceder a su propuesta gastronómica se debe tocar el timbre y pasar por un largo pasillo hasta llegar al amplio salón. Lo curioso es que la cocina está en el medio del restaurante rodeado por una gran barra rectangular. Los comensales podrán disfrutar de comida vegetariana, pequeños platos con guiños a propuestas callejeras y muchas influencias del mundo.
Los clásicos de Marti son el shawarma de hongos, el soufflé de quesos y los tortellini de parmesano y zucchini. “Con Marti quise armar un lugar más accesible, evitando los menús por pasos que tenía en Tegui. Siempre mis restaurantes expresan lo que yo pienso en cada momento de la cocina”, explicó el chef.
Ubicación: Rodríguez Peña 1973 – CABA
4ta Pared
Para acceder a 4ta Pared se debe reservar previamente de manera obligatoria. Se accede a través de un timbre y se debe elegir entre dos espacios posibles: un pequeño salón o la mesa del chef donde se puede ver al cocinero Pablo Cerne elaborando los platos en frente del comensal.
“La 4ta Pared es un término teatral y cinematográfico que describe la pared invisible imaginaria que divide a los actores del público espectador. Se dice que se rompe con la cuarta pared cuando el actor deja momentáneamente de representar su papel para interactuar directamente con la audiencia. Nosotros interpretamos la gastronomía en esos mismos términos: el menú degustación como una obra planteada en distintos tiempos, con público, espectador y actores interactuando en un espacio en común”, señaló Pablo. Esta innovadora propuesta cuenta con un menú de cuatro pasos que cambia cada treinta días, según la creatividad del equipo de cocina en cuanto a la estación del año.
Ubicación: Habana 3499 – CABA
Buri Omakase
Esta propuesta cuenta con 15 pasos que están divididos en tres momentos para un total de diez personas. El sushiman y propietario, Marcello El, demuestra su pasión por la pesca fresca del país a través de sus platos trabajando con pescadores de confianza de Mar del Plata y de la Costa Atlántica. “Cuando viajé a Japón, vi que allá es común encontrar restaurantes fuera de las locaciones habituales, en subsuelos, dentro de edificios, en galerías. Lo mismo encontré en otras partes de Asia. Así decidí armar Buri Omakase en una locación secreta y alejada de la calle: esto permite a los comensales realmente aislarse del mundo que los rodea, de lo que sucede en la calle, y disfrutar de una experiencia más completa”, manifestó.
Ubicación: Guatemala 5781 – CABA
Sin lugar a dudas, con cualquiera de estas cinco opciones, el público disfrutará de un ambiente distinto al de los restaurantes convencionales, con una gran atención, excelente gastronomía y con una experiencia que acompañe el momento.
LA NACION