El decreto de Javier Milei que destinó $ 100 mil millones a la nueva SIDE para gastos de carácter reservado quedó en la cuerda floja. En un duro comunicado el bloque radical de Diputados planteó su rechazo y se sumó a los reclamos para que el oficialismo convoque urgente a la Bicameral de Trámite Legislativo para tratarlo. Si La Libertad Avanza no lo hace, la oposición amenaza voltearlo directamente en el recinto.
El texto tiene consideraciones políticas y técnicas para cuestionar los dos DNU que el oficialismo publicó: uno para reestructurar la flamante SIDE y otro para otorgarle fondos millonarios pero en carácter reservado.
«Por decreto conformaron una nueva SIDE, y la primera decisión que tomó el Ejecutivo al respecto fue dotarla de 100.000 millones de pesos más de asignación presupuestaria, multiplicando por 8 el presupuesto anterior de 15.000 millones, al mismo tiempo que aseguran que “no hay plata”, por ejemplo, para la recomposición salarial de los jubilados», consideran.
Básicamente, que con el Congreso funcionando no se da la situación de necesidad y urgencia para decidir estos temas por decreto, y que se está violando la Constitución y la Ley de Administración Financiera, porque le corresponde al Parlamento asignar esos fondos.
«Según establece nuestra Constitución, esa asignación presupuestaria debe realizarla el Congreso Nacional, sobre todo teniendo en cuenta que de ninguna manera se da una situación de excepcionalidad como para hacerlo vía DNU», sentenciaron los radicales.
Como contó Clarín, parte de las críticas tienen que ver con que el DNU solo otorga partidas presupuestarias a los gastos reservados, que son los que deberían estar destinados a inteligencia, y no fija montos para la reestructuración y equipamiento que plantea en el primer decreto.
«En este marco, exigimos que de manera urgente tanto el DNU de reorganización del organismo de inteligencia como el de aumento presupuestario sean tratados en la Comisión Bicameral de Trámite Legislativo, al mismo tiempo que reclamamos la urgente conformación de la Comisión Bicameral de Fiscalización de Organismos y Actividades de Inteligencia», concluyen.
La presión para que el oficialismo convoque a la Bicameral de DNU
Más temprano los diputados que integran Trámite Legislativo Francisco Monti (UCR), Nicolás Massot (Hacemos) y el senador Carlos Espínola (Unidad Federal) le enviaron una carta al presidente de la comisión, el libertario Carlos Pagotto, para exigirle que convoque a una reunión de comisión «de carácter urgente, bajo apercibimiento de autoconvocarnos a los efectos de dar tratamiento a los decretos pendientes».
En el texto le recuerdan a Pagotto que en el último encuentro habían votado una moción para reunirse todas las semanas, sin embargo no volvieron a juntarse desde el 25 de abril.
A su vez, solicitan «rediseñar la dinámica de selección de instrumentos legales a tratar».
Junto a @Nicolas_Massot y @espinolacamau pedimos se normalice el funcionamiento de la comisión bicameral de trámite legislativo para cumplir con rigurosidad el mandato constitucional de dictaminar en tiempo y forma sobre todos los instrumentos que dicte el gobierno nacional… pic.twitter.com/JIDhBrQAey
— Francisco Monti (@franmmonti) July 30, 2024
El decreto puede ser rechazado con mayoría simple en el recinto si previamente se debatió y dictaminó en la Bicameral de DNU. De lo contrario la movida requiere una mayoría especial de dos tercios imposible de alcanzar sin el PRO.
Pero una vez ingresado en el Congreso, si pasan 10 días de enviado al Congreso y la Bicameral no lo trató cualquiera de las cámaras lo puede debatir directamente y rechazarlo por mayoría simple.