En declaraciones radiales el presidente de la FECH, Carlos Lorenzo, puntualizó que el régimen no va ni a favor ni en contra de la producción nacional, sino que en todo caso es un incentivo necesario para atraer inversiones de gran magnitud que localmente no se pueden sostener.
Lorenzo recordó que las estadísticas dan cuenta que en los últimos 20 años la provincia ha estado en un profundo estancamiento vinculado fundamentalmente a la falta de desarrollo de infraestructura que pudiera ampliar y diversificar la matriz productiva.
En esa dirección, expuso que el Régimen de Grandes Inversiones puede ser la puerta de entrada para desarrollos como el hidrógeno verde, que “hoy no estamos en condiciones de llevar adelante porque el nivel de Infraestructura e inversiones que requiere sólo puede ser posible de la mano de capitales extranjeros”.
Frente a las críticas de algunos sectores de la Industria hacia el RIGI, el empresario indicó que debe haber un acompañamiento de legislaciones locales como el Compre Chubut para levantar la guardia, pero sin tener que resignar el aporte de estos capitales vitales para la explotación de nuestros recursos naturales en toda la Patagonia.
El titular de la FECh insistió en que estas legislaciones para las inversiones son las que servirán de garantes de la seguridad jurídica para proyectos de esta envergadura.
“Las pymes locales tenemos que acompañar este proceso ya que en Comodoro Rivadavia durante el Foro de Hidrógeno quedó expuesto que la las principales empresas del mundo de la Unión Europea y los grandes capitales tienen posados sus ojos en Chubut y el futuro de la mano de las energías renovables”, remarcó.
Agregó que la provincia y el país “tienen que estar preparados para este proceso de transición energética que casi de forma obligada tenemos que transitar para no sólo brindar una mayor desarrollo y bienestar, sino también sostener un entramado productivo en la provincia que está reclamando dar un paso adelante mirando hacia el futuro”.
Lorenzo comparó este proceso del hidrógeno verde a lo ocurrido con Vaca Muerta más de una década atrás. “Había muchos detractores que decían que se ponía en juego nuestra soberanía y hoy estamos hablando de la tercera reserva de recursos no convencionales en el mundo y con la posibilidad de revertir el déficit energético que nos secó de dólares durante todos estos años”.